Tiempos de balances

El 2023 inicia su despedida y junto con ello surgen los primeros balances en todas las áreas de trabajo, siendo una fundamental la educación, incluida la infantil, es decir, aquella que va desde los primeros meses de vida y hasta los 6 años. Por la fragilidad de este rango etario, y las aprehensiones que entre los padres generan sus cuidados, fue el sector de la población que desafió más a la llamada “reactivación educativa”. En el intento por lograrla, unos tuvieron más éxito que otros, pero ¿qué marcó la diferencia? 

Escuela Especial de Lenguaje Tesón Minero es uno de los establecimientos parvularios que desde los inicios mismos de la pandemia se la jugó por buscar fórmulas para mantener el vínculo con sus alumnos y apoderados, de manera que, cuando todo pasara, la deserción no fuera un fantasma que hubiera consumido sus metas y objetivos. Creen que fueron estos esfuerzos prematuros y la buena acogida de las familias las claves para funcionar sin interrupciones durante los dos años más duros del Covid 19 (2020-2021), luego el 2022 y este 2023, año que pudiera considerarse el primero con normalidad “plena”, desde el momento en que todo el mundo pudo quitarse las mascarillas. 

“Cuando todo partió, o bien, cuando todo se detuvo ese marzo de 2020 pensábamos… ¿cómo podemos realizar clases a distancia a párvulos? ¿cómo vamos a hacerles terapias fonoaudiológicas por video? ¡imposible!”, recuerda Pamela Chaparro Zenteno, Administradora del establecimiento ubicado en la comuna de Lota. “Creo que el shock duró no más de una semana, luego dijimos: no podemos bajar las manos, es nuestro servicio, son nuestros niños, es nuestro trabajo, tenemos que seguir adelante como sea y así fue”, añade. 

Cuenta que lo vivido en esta escuela de lenguaje en cuanto a atreverse a usar estrategias profesionales y tecnológicas similares a las usadas en básica, media e inclusive universitaria, adaptadas al nivel parvulario, y con éxito, comprueban que la formación inicial o parvularia no debe ser nunca subestimada. “Las tías en todos sus roles, directivos, docentes, fonoaudióloga, técnicos, etc. estuvieron a la altura y el resultado fue un trabajo on line y luego híbrido lleno de creatividad, histrionismo y alegría que fue reconocido y premiado por las familias”, destaca. 

Consultada acerca de a qué se refiere con “premiado” explica que la retribución fue la mantención de un vínculo estrecho entre escuela y familias. “La gran mayoría se conectaba a las clases y, cuando se pudo enviar a los niños, lo hicieron, había un compromiso y confianza. Las evidencias de todo se mantienen en un canal de Youtube y en el historial de nuestras redes sociales. En Lota varios recintos parvularios estuvieron prácticamente cerrados y, al visibilizarse nuestra labor, muchos padres nos premiaron con su preferencia o recomendación”, agrega. 

La Administradora señala que este 2023 partieron con matrícula completa y, nuevamente, con un sinfín de otro tipo de desafíos. “Muchos de nuestros alumnos nuevos eran niños que salían por primera vez de su casa, por lo que, además de problemas de lenguaje, tenían serias dificultades de socialización. El período de adaptación fue notoriamente más extenso y todo el equipo puso a prueba -otra vez- su propia capacidad de adaptación, su profesionalismo y su perseverancia”.

idad de adaptación, su profesionalismo y su perseverancia”. 

Agrega que están contentos por los logros y que sienten que la “reactivación educativa” promovida por las autoridades halló tierra fértil en la comunidad de Escuela Tesón Minero. “Nuestras estrategias fueron muy coherentes con las orientaciones que la Subsecretaría de Educación Parvularia entregó para favorecer la asistencia dentro del nivel: Favorecer interacciones respetuosas y gratas entre los estamentos de la comunidad educativa para que haya un clima de bienestar, anunciar las actividades que se harán y difundir lo realizado para motivar la concurrencia, realizar seguimiento de los niños que faltan y ofrecer apoyos, cuidar la salud emocional y física de los párvulos fueron las principales directrices que guiaron el trabajo 2023”, detalla.  

Finalmente, la Administradora afirma sentir que, a nivel de educación parvularia, aún persiste un desafío transversal para las autoridades del área y para los propios establecimientos. “Hay que lograr que los padres realmente internalicen la importancia de la formación inicial, que no la vean como opcional, sino como imprescindible”, subraya. 

“Hay que enfatizar campañas para explicar en fácil a los padres que la neurociencia ha demostrado que los primeros años de vida es el momento más propicio para el desarrollo de los aprendizajes, ya que en esta etapa el cerebro se encuentra en un estado de adaptabilidad y maleabilidad incomparable. Asimismo, en lo que respecta a nuestra especialidad concreta, se debe hacer conciencia que el Trastorno Específico de Lenguaje (TEL) es una de las manifestaciones que podría dificultar el desarrollo emocional, social y escolar actual y futuro de niños y niñas por lo que su detección y abordaje temprano resulta ser fundamental”, concluye. 

Agrega que están contentos por los logros y que sienten que la “reactivación educativa” promovida por las autoridades halló tierra fértil en la comunidad de Escuela Tesón Minero. “Nuestras estrategias fueron muy coherentes con las orientaciones que la Subsecretaría de Educación Parvularia entregó para favorecer la asistencia dentro del nivel: Favorecer interacciones respetuosas y gratas entre los estamentos de la comunidad educativa para que haya un clima de bienestar, anunciar las actividades que se harán y difundir lo realizado para motivar la concurrencia, realizar seguimiento de los niños que faltan y ofrecer apoyos, cuidar la salud emocional y física de los párvulos fueron las principales directrices que guiaron el trabajo 2023”, detalla.  

Finalmente, la Administradora afirma sentir que, a nivel de educación parvularia, aún persiste un desafío transversal para las autoridades del área y para los propios establecimientos. “Hay que lograr que los padres realmente internalicen la importancia de la formación inicial, que no la vean como opcional, sino como imprescindible”, subraya. 

“Hay que enfatizar campañas para explicar en fácil a los padres que la neurociencia ha demostrado que los primeros años de vida es el momento más propicio para el desarrollo de los aprendizajes, ya que en esta etapa el cerebro se encuentra en un estado de adaptabilidad y maleabilidad incomparable. Asimismo, en lo que respecta a nuestra especialidad concreta, se debe hacer conciencia que el Trastorno Específico de Lenguaje (TEL) es una de las manifestaciones que podría dificultar el desarrollo emocional, social y escolar actual y futuro de niños y niñas por lo que su detección y abordaje temprano resulta ser fundamental”, concluye.